Justo ayer me encontraba en una clínica donde el paciente que teníamos delante nos comentaba lo siguiente, “mi familia y yo íbamos todos a la misma clínica pero han perdido mucho en atención y servicio, nos trasladaba que le atendían rápido y que no parecían hacerle caso en sus preocupaciones, lo despachaban.
Esto hoy es fundamental, todos queremos ser bien atendidos y que nos resuelvan las dudas, en este caso la clínica de origen no está percibiendo el escape de pacientes que está teniendo por un sencillo motivo que es el todo en cualquier consulta, CALIDAD ASISTENCIAL.
Lo que si tenemos muy presente es que cuando un paciente llama a clínica para coger cita es 100% seguro que se va a realizar el tratamiento ya que es quien demanda, va a depender de todos los impactos que reciba cuando esté en clínica, que seamos su opción elegida.
Para ser los “elegidos” deberemos hacer méritos con todo tipo de pacientes, antiguos y nuevos os dejamos unas premisas a tener en cuenta para construir una buena imagen sólida, honesta y profesional.
- Escuchar no es lo mismo que oír, la ESCUCHA ACTIVA es la habilidad de escuchar no solo lo que la persona está expresando directamente, sino los sentimientos, ideas o pensamientos que subyacen de lo que dice.
- Comunicar no es simplemente hablar, no es lo que se dice sino lo que interpreta nuestro paciente.
- Empatía no es simplemente ser simpático o cercano, es tener la capacidad de identificarse con los sentimientos ajenos, humanizarnos ante la situación que nos plantea el paciente, siempre desde un punto de vista profesional y realista.
Por ello la imagen personal es creada a partir de los elementos que nos rodean
- Imagen personal (como vestimos).
- Como hablamos.
- Mirada. (mirar a los ojos transmite autoconfianza)
- Como escribimos.
- Como gesticulamos.
Debemos ponernos en el lugar del paciente, debemos ser capaces de conectar y no dejar que el ritmo de clínica despersonalice lo que es el trato con el paciente, debemos esforzarnos más si queremos ser mejores y diferentes, si quieres ser un excelente referente en el sector en CALIDAD ASISTENCIAL parte de ti, de tu persona, de tus ganas de crecimiento y mejora continua.
No se trata de hacer más sino de hacerlo mejor, para encontrar el camino hacia la excelencia.